SOLUCIONES DIGITALES PARA LA ATENCIÓN PRIMARIA
Barcelona, España:
Las soluciones digitales están destinadas a convertirse en una herramienta indispensable para mejorar la gestión, la calidad, la eficiencia y los resultados de la atención primaria de la salud.
Atención Primaria 56(10):1-8, 2024
Autores:
Piera-Jiménez J, Dedeu T, Trupec T
Institución/es participante/s en la investigación:
Universitat Oberta de Cataluny
Título original:
Strengthening Primary Health Care in Europe with Digital Solutions
Título en castellano:
Fortalecimiento de la Atención Primaria en Europa con Soluciones Digitales
Extensión del Resumen-SIIC en castellano:
2.83 páginas impresas en papel A4
Introducción y objetivos
Se espera que la transformación digital tenga un impacto significativo sobre la atención primaria de la salud (APS), con el mejoramiento tanto de sus procesos logísticos (planificación, diseño, organización y gestión de servicios), como de sus resultados (accesibilidad, calidad, seguridad, efectividad y capacidad de respuesta). La digitalización de la APS aparece con frecuencia en la agenda de las políticas de salud de los países. Existen aún, sin embargo, barreras tecnológicas, financieras y profesionales que imponen una heterogeneidad significativa en los avances, no solo entre un país y otro, sino dentro de una misma nación.
A partir de la pandemia de COVID-19, las soluciones digitales se posicionaron como una herramienta para cerrar brechas en el acceso a la salud y para asegurar la provisión de servicios imprescindibles, lo que facilitó su adopción acelerada. El uso de las consultas remotas aumentó exponencialmente en muchos países con la suspensión de la atención presencial para problemas no esenciales, particularmente en la APS. El incremento del uso de las soluciones digitales durante la pandemia se vio facilitado por los cambios de políticas en las regulaciones, en los reembolsos, en la inversión en infraestructura técnica, y en el entrenamiento de los profesionales de la salud. Los autores sostienen que para maximizar los beneficios de las herramientas de salud digital y para asegurar su continuidad en la APS y en otras áreas del sistema de salud, aun después de haber logrado el control total de la COVID-19, son necesarias medidas proactivas que aprovechen la oportunidad que significó su implementación durante la pandemia.
La 71° sesión del Comité Europeo de la Organización Mundial de la Salud (OMS) alcanzó el consenso de que el aprovechamiento de las soluciones digitales es esencial para modernizar y mejorar los modelos de gestión de la APS, con el desarrollo de sistemas híbridos seguros durante las emergencias, y con la optimización de la búsqueda de salud y bienestar. Las soluciones digitales, combinadas cuidadosamente con servicios presenciales y con equipos móviles, puede llevar la APS a áreas rurales y remotas, de acuerdo con el grado de alfabetización digital y con el uso amigable de soluciones digitales para los diferentes grupos humanos. En las emergencias, las soluciones digitales permiten la gestión de servicios remotos y la asignación prioritaria de los recursos. La inversión en soluciones digitales, como las bases integradas de datos de salud y las herramientas de estratificación del riesgo, pueden significar una importante diferencia para identificar y para alcanzar poblaciones vulnerables. La digitalización en la APS puede ayudar a fortalecer los abordajes multidisciplinarios y el empoderamiento de los pacientes para su autocuidado.
El objetivo de esta revisión fue explorar y articular los datos relevantes sobre las cambiantes dinámicas de la transformación digital en la APS. Su foco fue puesto en el impacto de los avances tecnológicos sobre la provisión de servicios de los sistemas de salud, el compromiso del paciente y la eficiencia operativa, con un análisis de las tendencias actuales, de los desafíos, de las oportunidades y de los obstáculos.
Promoción y fortalecimiento de los abordajes multidisciplinarios en el cuidado de la salud
Los abordajes multidisciplinarios del cuidado de la salud se han convertido, en los últimos años, en aspectos centrales. Se reconoce que el cuidado de la salud no es solamente el tratamiento de las enfermedades, sino el soporte de la salud de los individuos, de las familias y de la comunidad en su conjunto. El abordaje multidisciplinario incluye colaboración entre profesionales de la salud de diferentes disciplinas, incluidos médicos, enfermeras, farmacéuticos, trabajadores sociales y profesionales de la salud mental, entre otros, para brindar cuidados integrales que abarquen las necesidades físicas, emocionales y sociales del paciente. Las soluciones digitales pueden apoyar a los equipos multidisciplinarios al facilitar la comunicación y la colaboración entre los miembros, el intercambio de información, las reuniones remotas y la programación de tareas, entre otros aspectos. La implementación efectiva de las soluciones digitales incluye el fortalecimiento de la alfabetización digital para los profesionales de la salud, la inclusión de las perspectivas del paciente, el conocimiento de las leyes regulatorias y la consideración de los aspectos relacionados con la privacidad.
Los registros electrónicos de salud (RES) constituyen un aspecto clave del proceso. Los RES integrados facilitan la gestión poblacional de la salud, la identificación de tendencias sanitarias y el tratamiento integral de las enfermedades crónicas. El acceso a los datos integrados de los pacientes permite a los profesionales de APS el desarrollo de planes efectivos de cuidado e intervenciones, el monitoreo del progreso del paciente y el seguimiento de las metas de salud. Las comunicaciones clínicas electrónicas asisten las derivaciones a especialistas, los resúmenes de alta hospitalaria, la indicación de medicamentos, los pedidos y los resultados de estudios complementarios, el listado actualizado de proveedores y de servicios, y la organización de la agenda de salud, entre otras actividades.
Mejora del acceso al sistema de salud
El abordaje del cuidado de la salud centrado en el paciente incluye poner al individuo en el centro de la gestión de sus cuidados, adaptando los servicios a sus necesidades individuales. Esta estrategia prioriza la comunicación efectiva, el acceso oportuno, la equidad sanitaria, los servicios centrados en el paciente y el uso de la tecnología.
El libre acceso a los cuidados de la APS enfrenta varios desafíos, tales como la inequidad, el aumento de las enfermedades crónicas, el envejecimiento poblacional y la restricción de recursos. Las soluciones digitales pueden colaborar para superar estos desafíos con nuevas formas de trabajo que cambien las expectativas del paciente, a la vez que preserven la continuidad de los cuidados y la seguridad. Durante la epidemia de COVID-19, por ejemplo, la telesalud facilitó el triaje remoto de los pacientes con el uso de algoritmos específicos.
Un aspecto clave de las soluciones digitales es la posibilidad de seguimiento remoto de pacientes, con tecnología que permite un cuidado efectivo más allá de las intervenciones tradicionales. Estos abordajes híbridos permiten que enfermeras de la comunidad visiten pacientes en áreas rurales y los conecten a electrocardiogramas interpretados a distancia, utilicen estetoscopios digitales o realicen prácticas básicas al lado de la cama del paciente (pruebas de laboratorio, ecografías), generando todos ellos datos para ser transmitidos y procesados. La cantidad de datos generados y procesados crece exponencialmente, y pueden ser utilizados para alimentar los modelos de aprendizaje automático de los sistemas de inteligencia artificial.
Facilitación de la provisión de servicios proactivos e individualizados
El uso de la tecnología digital para identificar áreas deficientes y para individualizar las intervenciones puede mejorar los resultados de los sistemas de salud y optimizar los costos. Su implementación requiere el cambio conceptual del abordaje centrado en el diagnóstico al abordaje centrado en el paciente, una visión holística del individuo en su comunidad.
Los sistemas de información digital ayudan a visualizar y resumir requerimientos complejos de salud, mediante la utilización de herramientas que analizan la carga de morbilidad de cada individuo, y permiten la estratificación en niveles de riesgo. Estudios de campo han mostrado que este abordaje predice mejor los resultados sanitarios y permite una mejor utilización de los recursos. La evaluación del riesgo poblacional requiere características apropiadas de los sistemas de información.
En la última década se han desarrollado equipos portátiles que ayudan al autocuidado de los pacientes, especialmente en el contexto de enfermedades cardiovasculares, diabetes y salud mental. Los estudios han informado una rentabilidad adecuada de estos sistemas, que permiten monitorear las actividades saludables, la adhesión a los tratamientos, la presencia de síntomas relevantes y la indicación precoz de consulta presencial.
Otra tecnología digital con potencial de aplicación en la APS es la tecnología terapéutica digital (TTD), que utiliza programas informáticos para diseñar intervenciones terapéuticas basadas en la evidencia y adaptadas a las necesidades individuales. Se ha implementado con buenos resultados en pacientes con diabetes y con depresión.
Empoderamiento de los pacientes para el autocuidado
El acceso universal a los recursos de salud incluye el empoderamiento de los pacientes para el autocuidado; la tecnología digital puede aportar conocimientos, destrezas y recursos para este fin. El autocuidado abarca un amplio rango de actividades, incluidos el monitoreo de síntomas, la gestión de la medicación, los cambios de estilo de vida y los controles de la enfermedad. Un portal individual permite el acceso continuo del paciente a sus registros de salud. Desde el punto de vista de las políticas de salud, el uso de la tecnología digital, en la forma de teléfonos inteligentes y de tabletas electrónicas, crea la oportunidad para las autoridades sanitarias de disminuir la carga asistencial de las instituciones mediante la promoción del autocuidado preventivo y del autodiagnóstico de trastornos de baja complejidad. La creciente seguridad de los dispositivos móviles permite superar temores del paciente y extender las aplicaciones.
Las tecnologías de sensores y de imágenes para uso domiciliario, con acceso y disponibilidad crecientes, se han convertido en un factor importante para organizar los cuidados de los ancianos en el hogar. Los datos generados por los relojes inteligentes pueden ser integrados en los registros individuales de salud de la persona.
Los recursos de Internet y de las redes sociales, con adecuadas regulaciones, pueden ser también una fuente importante para la información necesaria para el autocuidado. La inteligencia artificial es una herramienta en rápida evolución que, seguramente, va a integrarse con los recursos digitales para la APS.
Conclusiones
La digitalización, que mostró sus posibilidades durante la pandemia de COVID-19, está destinada a convertirse en una herramienta indispensable para mejorar la gestión, la calidad, la eficiencia y los resultados de la APS. Los niveles de madurez digital son variables, no solo entre los países, sino aun dentro de una misma nación. Introducir estos avances tecnológicos en los sistemas de salud implica lograr una visión integrada del cuidado de la salud, con incremento en la disponibilidad y accesibilidad de la tecnología digital para los profesionales de la salud y para los pacientes.